El cannabis es la sustancia ilícita más consumida en el mundo. En la Unión Europea, casi una de cada cuatro personas ha usado cannabis por lo menos una vez, es decir más de ochenta millones de personas. Dada la magnitud del fenómeno, parece razonable cuestionar políticas que obviamente no funcionan bien. ¿Pero es el momento de regular su consumo? En todo caso es el camino elegido por varios estados. ¿Con o sin razón ? El debate está abierto.
Después de la experiencia de Uruguay y la que se inició el 1 de enero en el estado de Colorado, que en breve será seguido por el estado de Washington, los legisladores decidieron ir mucho más allá de los países que ya toleran el consumo de cannabis. Establecieron un sistema en el que las redes de cultura, distribución y comercialización están en las manos de las autoridades. Solo en el estado de Colorado, cerca de 350 licencias para abrir «Coffee shops» fueron otorgadas , un negocio que puede traer beneficios muy atractivos, dado que después de una semana de actividad las primeras 37 tiendas acumulaban una cifra de negocio de cinco millones de dólares.
¿ Acabar con el mercado negro … o bien no ?
En los últimos años se hicieron oír voces que denunciaban el fracaso de la «guerra contra las drogas » y abogaban por políticas u enfoques diferentes. Hoy en día, parece imposible negar que, a pesar de los miles de millones de dólares invertidos , los niveles de consumo de cannabis siguen aumentando en el mundo, mientras que el mercado negro está poniendo en peligro la economía y estabilidad social en algunos países como México .
A la luz de lo anterior, los legisladores estadounidenses y uruguayos de alguna manera decidieron matar dos pájaros de un tiro. 1) Quitar cualquier interés económico al tráfico y trasladar los beneficios de este nuevo «oro verde» al estado. Y 2) poner fin a la marginación de los fumadores de porros mientras que se facilitan nuevos “esfuerzos de prevención.»
Sin embargo, la legalización sigue siendo una alternativa de alto riesgo : si los precios son demasiado altos, no tendrá ningún impacto en el mercado negro. Si son demasiado bajos, fomentará el consumo de un producto ya trivializado por el hecho solo de suprimir la prohibición.
¿Podemos predecir una explosión de consumo?
Muchos de aquellos que se oponen a la legalización anuncian una «explosión de consumo» en los países que han hecho o que harán esta elección. Que fuese verdad o no, nadie puede responder a esa pregunta, porque ningún país tiene suficientes datos sobre experiencias adquiridas. Incluso en los Países Bajos, uno de los países más permisivos en materia de cannabis, esta droga no es legal, sino simplemente tolerada.
En realidad, las comparaciones entre los distintos países europeos muestran que no existe una relación mecánica entre la legislación y los niveles de consumo. Los Países Bajos por ejemplo tienen un nivel de consumo que está bajando, mientras que España (un país también bastante tolerante) se mantiene a la cabeza de la Unión Europea en consumo de cannabis. En contraste, Suecia y Francia son de los países más represivos. Sin embargo, el primero tiene una tasa de consumo relativamente bajo, mientras que en Francia el número de usuarios ha alcanzado la cumbre…
El camino elegido por algunos países plantea muchas preguntas. Estas preguntas son tan legítimas que algunos aspectos del problema nunca estuvieron sobre la mesa, como los riesgos sanitarios asociados con el consumo de cannabis.
La Red Internacional Dianova especializada en el tratamiento y prevención de las adicciones, compuesta por ONG miembros de la sociedad civil publicó en 2010 su Manifiesto, donde queda patente su posicionamiento en esta materia. No obstante, el impacto de las decisiones de algunos Gobiernos a favor de la regulación del consumo, en algunos países donde Dianova está presente, nos indican que debemos abrir un periodo de reflexión para analizar las diferentes perspectivas y posicionarnos, siempre en el marco de nuestra Misión, que es: «desarrollar acciones y programas que contribuyan activamente a la autonomía personal y al progreso social».
Contaremos con la colaboración de personas con autoridad en la materia como el Dr. Kevin Sabet, Director of the Drug Policy Institute at the University of Florida y co-fundador del Proyecto SAM(Smart Approaches to Marijuana). A través de estos opiniones de expertos, y también con vuestras aportaciones y reflexiones, queremos generar un debate justo y equilibrado que ayude hacer avanzar las cosas.
Gracias a tod@s por participar a través de las redes!
Twitter: Dianova_org #Dianova