El futuro del tratamiento a debate

La Comisión de Estupefacientes de Naciones Unidas organiza una reunión temática para revisar cómo fortalecer el ámbito de tratamiento  

Tratamiento de adicciones

Tal y como planteado por el Relator Especial de las Naciones Unidas por el derecho a la salud, las personas que consumen drogas tienen que ser reconocidas como población de alto riesgo – Foto Shutterstock, CC

Por Lucía Goberna – “Los servicios de salud y tratamiento de drogas continúan quedándose cortos ante las necesidades y las muertes relacionadas con el consumo de drogas han aumentado”. Así de contundente es la Declaración Ministerial aprobada en marzo de 2019 por altos representantes en materia de droga/salud en las Naciones Unidas.

Ante esta afirmación tan desalentadora y con la mirada puesta en poder cumplir con los objetivos comprometidos a nivel internacional que implicarían entre muchos otros, reforzar notablemente el ámbito de tratamiento (como fijado en la UNGASS 2016), la Comisión de Estupefacientes ha previsto organizar una serie de sesiones temáticas anualmente del 2020-2024 previstas para septiembre-octubre para evaluar cómo mejorar las dificultades descritas. En estos encuentros está previsto que se difunda información, buenas prácticas y que se compartan las lecciones aprendidas.

En el 2020, la sesión temática de la Comisión de Estupefacientes (3ª reunión intersessional de la 63 sesión de la Comisión de Estupefacientes) abordó los ámbitos de tratamiento, servicios de reducción de daños, las nuevas sustancias psicoactivas y la accesibilidad y disponibilidad de sustancias controladas con objetivos médicos y científicos.

Una situación muy preocupante respecto al ámbito de tratamiento

La Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (ONUDD) estima que alrededor de 35,6 millones de personas sufren trastorno por consumo de sustancias, refiriéndose a que el consumo de drogas es problemático y que requieren tratamiento. Sin embargo, solo 1 de cada 8 personas con trastorno por consumo de sustancias, tiene disponibilidad y acceso a servicios de tratamiento. En el caso de las mujeres, la situación es incluso peor: aunque las mujeres supongan 1 de cada 3 consumidores de drogas, solo 1 de cada 5 personas en tratamiento es una mujer. El acceso y disponibilidad de servicios en las cárceles es aún más bajo, especialmente teniendo en cuenta que las personas privadas de libertad tienen una prevalencia mayor. La situación de otras poblaciones vulnerables como son las personas demandantes de asilo o las personas en entornos humanitarios es ciertamente preocupante.

 

Otro tema del que poco se habla es de la asequibilidad de los servicios. Según datos preliminares de un estudio de 2020 de la Organización Mundial de la Salud, si bien la mayoría de países ofrece servicios especializados para los trastornos por abuso de sustancias (en concreto 85% de los 123 países estudiados), un largo porcentaje de estos (35%) no están disponibles sin una contribución económica de los beneficiarios del servicio. Ello indica claros problemas de asequibilidad, más teniendo en cuenta el bajo perfil socio-económico y de vulnerabilidad de muchas de las personas que requieren este tipo de servicios.

Si a todo esto le añadimos la pandemia mundial que ha afectado de forma muy particular a las personas que consumen drogas ya que las personas que consumen drogas presentan riesgos adicionales de infección y más patologías pre-existentes, lo que les hacen ser más vulnerables al COVID. Además, tal y como planteado por el Relator Especial de las Naciones Unidas por el derecho a la salud, las personas que consumen drogas tienen que ser reconocidas como población de alto riesgo.

Además, el COVID ha supuesto un auténtico reto para la continuidad de los servicios. Desafortunadamente, muchos servicios han tenido que cerrar debido a la pandemia al no contar con el apoyo y medios suficientes para seguir operando siguiendo con los protocolos de seguridad pertinentes. Sin embargo, el COVID también ha dado lugar a una gran innovación en los servicios de tratamiento que han operado en algunos casos con un mayor rango de flexibilidad en la prescripción de tratamiento sustitutivo y que han hecho un mucho mayor uso de la telemedicina.

CND

Las sesiones online de la CND pueden seguirse en directo a partir de su página web

Numerosos retos del futuro

Entre muchos otros, la sesión trató temas como:

  • Asegurar a la continuidad de servicios de tratamiento en el marco de COVID
  • Aumentar los recursos disponibles para servicios de tratamiento
  • Contar con una mayor oferta/vacantes de centros de tratamiento
  • Incrementar la cobertura de los servicios de tratamiento y asegurar que éstos se ajusten a la evidencia científica y al respeto de los derechos humanos.
  • En línea con la lógica del continuo de servicios, mejorar la calidad y la integración con los servicios de prevención, reducción de daños y reintegración
  • Poner un mayor foco en las necesidades de las poblaciones vulnerables
  • Asegurar los servicios de tratamiento de sustitución de opioides
  • Promoción de las medidas alternativas al encarcelamiento que pasan por el ofrecimiento voluntario de ingreso en los servicios de tratamiento
  • Asegurar la disponibilidad de servicios de tratamiento y soporte farmacológico en los centros penitenciarios y la continuidad de servicios tras la puesta en libertad
  • Reforzar significativamente los servicios de reintegración
  • Asequibilidad de los servicios especializados
  • Necesidades de formación continua para los profesionales
  • Promoción de los programas de prevención de sobredosis

Actualización de los Estándares Internacionales de Tratamiento de los Trastornos de Consumo de Drogas

Destacar que la Organización Mundial de la Salud junto con la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito han actualizado en el 2020 la guía de los Estándares Internacionales de Tratamiento de los Trastornos de Consumo de Drogas. La publicación quiere servir de apoyo a los países en la implementación de servicios efectivos, basados en la evidencia y con perspectivas éticas de tratamiento, especialmente enfocado para entornos con pocos recursos.

La guía proporciona información clave para la organización de los servicios de tratamiento, describe los principales componentes de los sistemas de tratamiento e incluye consideraciones para poblaciones con necesidades especiales.

Esta edición actualizada ha incorporado los resultados de las pruebas de campo en nueve países. Pueden acceder a la publicación aquí.

Voces de la sociedad civil

La sociedad civil tiene una posición asegurada en estas reuniones temáticas que es canalizada a través de la plataforma del Comité de ONG de drogas de Viena. Para esta sesión, pudo seleccionar a 18 representantes entre los que se encontraban:

  • Phaedon Kaloterakis, representando a la Federación Mundial de Comunidades Terapeútica. Puede acceder a su intervención escrita aquí.
  • Laurène Collard, representando al Foro de la Sociedad Civil de Drogas de la UE. Puede acceder al video de la intervención aquí.

Dianova es miembro de ambas plataformas y ha participado activamente en la elaboración de las recomendaciones del Foro de la Sociedad Civil de Drogas de la EU de cara a esta sesión para las instituciones europeas.

Si se puede: más y mejores tratamientos

Desafortunadamente, la necesidad de contar tratamientos para los trastornos por consumo de sustancias y otros comportamientos adictivos no parece que vaya a desaparecer en el futuro próximo. Los servicios de tratamiento, así como todos los servicios de drogas (prevención, reducción de daños e reintegración) están en continua mejora y adaptación a las necesidades de las personas que los requieren. Se avecinan tiempos complicados con el COVID, pero no hay que olvidar que, si hay voluntad política, hay mucho margen de mejora en el diseño, implementación y mejora de los programas. Por ello, que la Comisión de Estupefacientes haya dedicado una sesión temática enter otros, al ámbito de tratamiento nos parece un paso en la buena dirección para darle un mayor reconocimiento y visibilidad.

Otros enlaces de interés