Adolescentes reconstruyéndose en ‘Las Torrecillas’

Brindar respuestas integrales a cuestiones complejas: los programas residenciales de adicciones con enfoque comunitario para la juventud de Asociación Dianova España

Adolescente

La adolescencia es un periodo crítico de desarrollo donde la vulnerabilidad se puede ver amplificada si existe un consumo problemático y/o una conducta adictiva – imagen: Shutterstock

Por María José Vera Aires – Los programas de la Asociación Dianova España en sus recursos se centran fundamentalmente en el tratamiento de las adicciones, incluyendo entre ellos los destinados a la juventud de entre 14 y 17 años con consumos y problemas asociados. Estos programas cuentan con un diseño y una implementación característica que aborda las necesidades y particularidades de este colectivo.

La juventud en situaciones complejas

La adolescencia, como etapa evolutiva, presenta necesidades concretas que deben tenerse en cuenta. Es una época de cambios y un periodo crítico de desarrollo donde la vulnerabilidad se puede ver amplificada si existe un consumo problemático y/o una conducta adictiva. Los y las jóvenes con quienes trabajamos tienen situaciones complejas; a la adicción muchas veces se le suman ejes de vulnerabilidad, como problemas de salud mental (trastornos de conducta, de personalidad, alimenticios, TDAH…), dificultades de acceso a la educación, bajo apoyo social, violencias diversas a lo largo de su vida y otros aspectos que deben considerarse en el abordaje integral.

Acompañarlos en el proceso de recuperación

Cuando Dianova España, hace más de 20 años, detectó la necesidad de dar respuesta y acompañar en el proceso de recuperación a este colectivo, decidió abrir recursos específicos para personas menores con adicciones y otros problemas relacionados, adaptando su programa para personas adultas con consumos problemáticos de sustancias y aplicando la experiencia adquirida.

En la actualidad son dos los centros específicos para personas menores de la Asociación: el Centro Educativo Terapéutico Zandueta (Navarra), y el Centro Educativo Terapéutico Las Torrecillas (en Puente Genil, Córdoba).

Una relación óptima con los profesionales

¿Por qué es necesario un enfoque específico en el tratamiento residencial de adicciones con personas menores?

El enfoque específico es perceptible nada más entrar en los centros. Los/las menores establecen una relación óptima de cercanía con el equipo de profesionales, de manera que lo primero que destaca es la necesidad (y demanda) de supervisión constante en cada paso que dan. Y no aceptan la supervisión de una figura de autoridad, sino un acompañamiento directo y continuo de una persona que les proporciona seguridad y afecto, que refuerza cada una de sus acciones. Si un/a adolescente generalmente quiere mantenerse lejos de la persona adulta, una imagen frecuente de los centros es la de un grupo de jóvenes acompañado continuamente del personal educativo y de quienes procuran no separarse en ningún momento.

Imagen adolescente

En los centros educativos terapéuticos de Dianova se plantea como objetivo fundamental el minimizar los factores de riesgo y sobre todo fortalecer los factores de protección a través de una supervisión constante de parte del equipo profesional – Imagen: Shutterstock

Responsabilizar y preparar a la reinserción

Uno de los aspectos fundamentales que se trabaja con los y las menores es la asunción de responsabilidades, entre las cuales destacan las del área académica. Llama también la atención verlas y verlos con libros, libretas y lápices, e incluso quienes están repasando en voz alta, porque tienen un examen, sobre todo considerando que la falta de motivación por los estudios y el absentismo de cada escolar han sido manifestaciones importantes de su problemática a lo largo de sus vidas. En los centros para personas menores Dianova esta área es fundamental, porque sin trabajarla es difícil la reinserción del o de la menor una vez salga del centro, puesto que deberá desarrollar su vida en un contexto normalizado en el que a esa edad el centro escolar es parte fundamental. Pero más llama la atención comprobar que, efectivamente, retoman sus estudios con éxito y que la mayoría sube de curso.

El deporte como vehículo para un estilo de vida más saludable

A pesar de los problemas de consumo, estos/estas jóvenes no suelen presentar un deterioro físico significativo, sino que, durante la adolescencia, irradian energía que necesitan canalizar continuamente en actividades dinámicas. Ahí toman especial relevancia el deporte, de manera que los profesionales lo fomentan como una forma, además, de adquirir hábitos de vida saludables que se alejen del estilo de vida anterior. Estas actividades se realizan tanto en recursos externos como dentro del centro, donde poco a poco acaban convirtiendo cualquier zona ajardinada en un polideportivo.

Ayudar a las familias a reconocer sus problemas

Además, el trabajo con la familia es fundamental, ya que las/los menores tendrán que volver a vivir con ella, a pesar de que las personas adultas referentes han manifestado problemas para abordar sus carencias. Hay que desarrollar en las familias actitudes y aptitudes para volver a tener en casa a estas chicas o chicos, aunque primero hay que romper la barrera que supone no ser capaces de reconocer que son parte responsable de los problemas que presentan las chicas/os y acompañar también a los familiares en este proceso.

¡Una enorme felicitación a todos los y las jóvenes!

Estas son algunas de las muchas particularidades de los programas para personas menores de Dianova España que serían difíciles de resumir en este texto. Si trabajar las mismas entraña sus dificultades en una situación normalizada, aún lo fue más durante el confinamiento de 2020 debido a la pandemia. Las y los adolescentes residentes en los centros pasaron días encerrados allí con las/los profesionales, sabiendo que a pesar de las dificultades de la situación tenían que seguir trabajando su programa educativo terapéutico e ir alcanzando sus objetivos. Y lo ¡lograron!

El 4 de junio de 2021 la Dirección General de Infancia de la Comunidad de Madrid entregó a los dos CET Dianova un reconocimiento al trabajo con personas menores durante la pandemia, lo que nos llena de orgullo. Pero más orgullo sentimos de ellas y ellos, jóvenes que cada día trabajan para cambiar el rumbo de su historia.