“No hay “planeta B». El planeta en el que vivimos ahora es todo lo que tenemos. Debemos asegurar que sea habitable, pacífico y sostenible”

La solidaridad entre los pueblos es un valor universal esencial para construir un futuro más prometedor, igualitario, justo y pacífico – imagen: Shutterstock
Por María Victoria Espada – Con motivo de la celebración del Día de las Naciones Unidas, el pasado 25 de octubre, la Conferencia de Organizaciones No Gubernamentales en Relación Consultiva con las Naciones Unidas (CoNGO) organizó una “Cumbre de la Sociedad Civil sobre Cuestiones Sustantivas” en formato virtual. Como evento preliminar de cara a la 27 Asamblea General de CoNGO, la cumbre sirvió específicamente para identificar las direcciones estratégicas de la organización de cara a su próximo mandato 2021-2025.
El mundo que queremos
Bajo el título “Moldeando el futuro: la ONU que necesitamos para el mundo que queremos”, en las diferentes sesiones se abordaron problemas e inquietudes mundiales a los que diariamente se enfrentan tanto las organizaciones no gubernamentales (ONG) como la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Entre ellos, la dignidad y los derechos humanos; la justicia social, incluida la migración, el racismo y la salud; la justicia de género junto a la juventud y la solidaridad intergeneracional; el desarrollo sostenible y las acciones humanitarias; la paz y la seguridad de las personas y el planeta; y el multilateralismo y las relaciones entre la ONU y las ONG, en particular, respecto de la protección del espacio y discurso cívicos.
Amenazas para la democracia y los derechos humanos
De forma transversal, los panelistas identificaron una serie de circunstancias actuales cuyo análisis contribuirá a generar soluciones para un mejor futuro. Por un lado, el racismo estructural y sistémico, la grave situación de los migrantes y los refugiados, los efectos del cambio climático y la fragilidad de la paz y la seguridad mundiales. Por otro, el desigual acceso a las vacunas contra la Covid-19, el desigual acceso a internet, la desinformación y la proliferación de noticias falsas. La reducción del espacio civil y el retroceso de las libertades fundamentales también fueron señalados como amenazas para la democracia, el Estado de derecho y los derechos humanos. La cumbre fue también una buena ocasión para referenciar el informe “Nuestra Agenda Común” del Secretario General del Naciones Unidas, António Guterres.
Es necesario elaborar un nuevo contrato social
La solidaridad entre los pueblos fue identificada como un valor universal esencial para construir un futuro más prometedor, igualitario, justo y pacífico. Los panelistas precisaron la necesidad de un nuevo contrato social que conceda igual importancia a los derechos civiles, políticos, económicos, sociales y culturales.
Igualmente, una educación de calidad, incluida la educación para la ciudadanía mundial, fomentará la paz, el diálogo y el respeto mediante la apreciación de la diversidad cultural.
No menos importante será el trabajo conjunto entre la sociedad civil y la ONU para facilitar la adaptación al cambio climático, la reducción del riesgo de desastres medioambientales y el fortalecimiento de las comunidades, especialmente las más vulnerables.
Importancia de la cooperación multilateral para cumplir los ODS
Para ello, es fundamental que los Estados miembros de la ONU respalden el trabajo de la organización mediante una financiación amplia, oportuna y sostenida en el tiempo de su presupuesto básico. Las convenciones y tratados internacionales también deben ser ratificados e implementados por los países para garantizar la protección de los derechos humanos y el Estado de Derecho.
Sin duda, la cooperación multilateral debe ser reforzada para garantizar el cumplimiento de la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), tarea en la que la cooperación de la sociedad civil es imprescindible.
En este sentido, los panelistas solicitaron que se amplíe el acceso físico y político de las ONG a las conferencias de la ONU y se considere su conocimiento y experiencia como aportes valiosos a las deliberaciones gubernamentales y a la formulación de políticas.
La experiencia de CoNGO
Asimismo, el rol de CoNGO como constructor de puentes entre la ONU y las organizaciones de la sociedad civil fue señalado como indispensable, especialmente con aquellas ONG que operan en las partes más desatendidas del mundo. De forma unánime se reconoció el trabajo de los Comités Sustantivos de CoNGO, los cuales facilitan que las ONG debatan cuestiones relacionadas con los programas, políticas y actividades de la ONU, expresando sus propios puntos de vista y defendiendo sus posiciones al respecto. Para dar continuidad al trabajo de CoNGO y aprovechar sus años de experiencia, será necesaria una base financiera más sólida a futuro, como señalaron los panelistas, lo que también permitirá a la organización reforzar sus actividades de consulta, colaboración y cooperación entre ONG y con las Naciones Unidas.
CoNGO es una asociación de ONG internacional e independiente fundada en 1948 cuya misión es asegurar el acceso y la presencia de ONG en los procesos consultivos convocados por las Naciones Unidas y facilitar el diálogo sustantivo entre ambas partes. Dianova International ha sido miembro del consejo directivo de CoNGO del 2014 al 2018 y vicepresidente general desde 2018.
Lee el informe de síntesis de la Cumbre de la Sociedad Civil sobre Cuestiones Sustantivas.