Por Jordi Alos, Presidente de Dianova Uruguay – Organisation Internationale Dianova asistió en forma virtual y en el apartado destinado a Intervenciones de Observadores Permanentes ante la OEA, Organizaciones Internacionales y Regionales y Organizaciones de la Sociedad Civil acreditadas ante la OEA, presentó una declaración vinculada al Género y los Derechos Humanos.
En estas reunión, pudimos observar que si bien el continente presenta realidades muy diversas, el concepto de “cooperación” entre los 35 países miembros va cobrando solidez, sobre todo por el intercambio de experiencias, las acciones y las formaciones que desarrollan los grupos de expertos de CICAD (Desarrollo Alternativo Integral y Sostenible, Reducción de la Demanda, Narcotráfico Marítimo, Sustancias Químicas y Farmacéuticos y Control de Lavado de Activos) acompañados por el equipo de CICAD, van logrando resultados positivos.
- Discurso del Secretario General de OAS Luis Almagro
- Documentos y presentaciones
- Leer la declaración de Patricia Puigdeval ante la CICAD
En relación a las personas afectadas por consumos de drogas y el micro tráfico, queremos destacar que hemos podido constatar que se incorporan con más fuerza los conceptos de Derechos Humanos, Salud Pública y Desarrollo Sostenible, lo cual representa un gran avance, considerando que algunas de las políticas públicas implementadas en la región, aun aceptando que el concepto de “guerra a las drogas” ha fracasado, continúan criminalizando el consumo y la tenencia, provocando daño y vulnerando los Derechos Humanos.
Hemos constatado con satisfacción el énfasis que se ha puesto en la necesidad de incorporar la perspectiva de género en las políticas públicas, no tener en cuenta esta perspectiva con un enfoque transversal amenaza seriamente la eficacia de la política pública.
Todos sabemos que cuando hablamos de drogas existen una multiplicidad de factores inherentes a la temática (narcotráfico, lavado de activos, seguridad, países productores/receptores, personas afectadas, etc.) y en estos espacios, cada uno de los participantes, tenemos tendencia a pensar en el problema desde nuestra propia óptica.
Es, en este punto, en el que debemos reflexionar sobre cuál es nuestro rol como sociedad civil organizada y cuáles son las estrategias de incidir en la política pública teniendo en cuenta que los espacios y tiempos asignados en estas sesiones suelen ser muy acotados.
Es imprescindible que nuestra defensa de derechos de las personas afectadas por el consumo se realice por nuestra interacción con los gobiernos de los países en los que desarrollamos nuestras actividades, solo así lograremos incidir en los acuerdos que toman los estados en estas reuniones multilaterales.
Desde Dianova hemos aprovechado esta ocasión para manifestar que creemos firmemente que la interacción entre estado/sociedad civil es beneficiosa en base de una alianza estratégica y que contemplar a la sociedad civil únicamente como agente implementador de política pública, no aprovecha las fortalezas que pueden surgir de esta interacción.
Queremos hacer especial mención a las palabras del Secretario General de OEA Luis Almagro que en su discurso de apertura hizo hincapié en la necesidad de escuchar a la sociedad civil “Estas reflexiones de la sociedad civil son reflejo del debate público, del sentir de los ciudadanos. No cerremos los oídos a lo que nos dice la sociedad civil”.